La prueba de Lipasa en Suero mide los niveles en sangre de esta enzima digestiva, que es producida casi exclusivamente por el páncreas. Su función principal es descomponer las grasas (lípidos) en el intestino. Es el marcador bioquímico más importante para el diagnóstico de la pancreatitis aguda. En Centrolab, tu laboratorio clínico en Medellín, procesamos este examen con la rapidez y precisión que una emergencia requiere.

Estos son 5 beneficios clave de medir la lipasa en sangre:

1. Marcador Más Específico para el Diagnóstico de la Pancreatitis Aguda: Este es su beneficio más importante. A diferencia de la amilasa (que también se produce en las glándulas salivales), la lipasa es mucho más específica del páncreas. Una elevación significativa de la lipasa es una señal muy fuerte y fiable de que existe un daño o inflamación en el páncreas.

2. Permanece Elevada por más Tiempo, Ampliando la Ventana Diagnóstica: La lipasa no solo se eleva rápidamente tras el inicio de una pancreatitis aguda (en 3 a 6 horas), sino que permanece elevada en la sangre por un período más largo que la amilasa (hasta por 7 a 14 días). Esto permite un diagnóstico certero incluso si el paciente consulta al médico varios días después del inicio del dolor.

3. Resultados Rápidos para una Decisión de Urgencia: Al ser una prueba química estándar, sus resultados están disponibles rápidamente. En un servicio de urgencias, esto es crucial para que el médico pueda confirmar la sospecha de pancreatitis e iniciar el tratamiento de soporte hospitalario (hidratación, manejo del dolor) de inmediato.

4. Confirmación Diagnóstica junto a la Amilasa: Aunque la lipasa es superior, a menudo se mide junto con la amilasa. La combinación de una amilasa y una lipasa elevadas (generalmente más de 3 veces su valor normal) hace que el diagnóstico bioquímico de pancreatitis aguda sea prácticamente indiscutible.

5. Menos Afectada por Otras Condiciones No Pancreáticas: Dado que la lipasa es más específica del páncreas, su resultado no suele verse afectado por otras condiciones que sí pueden elevar la amilasa, como la parotiditis (paperas) o ciertas enfermedades ginecológicas, lo que reduce la posibilidad de un diagnóstico confuso.