El análisis de gastrina implica la extracción de una muestra de sangre para medir los niveles de esta hormona en el organismo. La gastrina es una hormona producida principalmente por las células del estómago y del intestino delgado, y desempeña un papel crucial en la regulación de la producción de ácido gástrico en el estómago.

Durante la toma de muestras, se extrae una cantidad de sangre del paciente, generalmente del brazo, utilizando una aguja estéril y un tubo especializado para recolectar la muestra. Posteriormente, esta muestra se envía a un laboratorio clínico para su análisis.

El análisis de gastrina se realiza para:

Evaluar trastornos gástricos: Se utiliza para ayudar a diagnosticar condiciones relacionadas con la producción excesiva de ácido en el estómago, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), úlceras pépticas, gastritis y el síndrome de Zollinger-Ellison, un trastorno poco común que causa tumores en el páncreas o el intestino que generan gastrina en exceso.

Monitorear tratamientos: Se puede usar para evaluar la respuesta al tratamiento o para monitorear la eficacia de medicamentos que regulan la producción de ácido gástrico, como los inhibidores de la bomba de protones (IBP) o los bloqueadores de los receptores H2.

Los niveles elevados de gastrina pueden indicar hipersecreción ácida debido a diversas condiciones. Sin embargo, los resultados anormales de gastrina generalmente se interpretan en conjunto con otros exámenes y la historia clínica del paciente para establecer un diagnóstico preciso y determinar el tratamiento adecuado.